Última actualización: junio 29, 2022
Con 21 semanas de embarazo tu barriga será todo un espectáculo y te encantará lucirla. Tu bebé se moverá enérgicamente y aunque sus movimientos serán todavía reflejos, irá tomando más control sobre ellos. En esta etapa es posible que tengas problemas para dormir y aparezcan pérdidas de flujo vaginal u orina. Además, tendrás más peso abdominal y sentirás más a tu bebé.
Ya has llegado a las 21 semanas de embarazo y en este punto tu barriga empieza a tomar forma tanto como tu bebé. Por eso, este último debería presentar estas características:
En esta etapa del crecimiento de tu bebé, podrás imaginarte que lo estás haciendo muy bien, pero siempre debes cuidarte y tener control sobre tus actividades para evitar daños al feto.
Seguramente hayas tenido que comprar ropa de embarazada o adaptar tu vestuario, porque en esta etapa tu barriga empezará a crecer tanto que querrás lucirla en todas partes. Podrás sentir a tu bebé aproximadamente en el punto situado a un centímetro por encima de tu ombligo.
En esta etapa tu musculatura abdominal se adaptará al bebé que llevas en tu interior. Esto podrá ocasionar algunas molestias y empezarás a sentir más peso en esta región.
Es común que te sientas más hinchada de lo normal. Esto es debido a la retención de líquidos, y para evitarlo puedes realizar ejercicios de manera habitual para sentirte más a gusto con tus nuevos cambios corporales.
Por otra parte, tu piel lucirá mucho más sana y luminosa. Y es que no todo representará cambios negativos. Por ejemplo, ahora tu piel parecerá más joven y radiante, tanto que seguro muchos te lo harán saber.
A las 21 semanas de embarazo tendrás algunos síntomas comunes de esta etapa, mayormente por el crecimiento del útero y los movimientos constantes del bebé en formación. Por ejemplo:
También tendrás problemas de sueño, así como pérdidas vaginales claras y grasientas. En este punto, si notas que tienes picor en tu zona íntima, huele demasiado fuerte o las pérdidas son de color amarillo o verdoso, debes ir de inmediato con tu médico.
En la semana 21 del embarazo es normal que los músculos que forman la pared del abdomen se estiren hacia los lados. Como se separan de la línea central, empezarás a sufrir diástasis de rectos, el cual consiste en un bulto en la línea media.
Durante este proceso no sentirás dolor ni tampoco deberás temer por ti o tu bebé. Solo es una etapa que le permitirá a tu hijo moverse con mayor libertad. Ten presente que este bulto se hará más pronunciado a medida que avance el embarazo.
Es normal que en esta etapa del embarazo el pequeño se mueva o dé algunas patadas. Justo por eso, el abdomen se vuelve más grande para que el bebé tenga más libertad.
El abdomen suele incrementar su tamaño debido al crecimiento del útero y para adaptarse al bebé que llevas en tu interior. El ombligo puede volverse plano o sobresalir un poco.
Algunos pediatras indican que el bebé puede dormir hasta 20 horas al día, aunque esto depende de la actividad que tenga la mamá.